El mejillón, es uno de los productos de mar más tradicionales de la gastronomía española. Especialmente la gallega, y del que se hacen platos exquisitos y muy sencillos como los Mejillones a la Vinagreta. Gracias a su popularidad y lo asequible de su precio, no falta nunca como ingrediente principal en unas buenas tapas, en un buen arroz o como no, en una buena mariscada

El mejillón es el marisco más consumido del mundo. Por ejemplo; Bélgica tiene como plato nacional los “moules et frites”, mejillones con patatas fritas, plato típico también de Francia y Holanda. En Croacia, tienen mejillones a la Buzara, en Perú, los mejillones con “leche de tigre” y no es leche de tigre de manera literal, en Perú llaman leche de tigre al resto que queda al marinar el ceviche. 

¿Y en España? En España una de las recetas más famosas es la receta que te traemos a continuación; mejillones a la vinagreta

  • Su aportación de proteínas, su riqueza en hierro, fósforo, potasio, sodio, yodo, magnesio, selenio, ácido fólico y vitamina B1. Hace que sea uno de los mejores alimentos para prevenir la anemia. 
  • Son fáciles de cultivar lo que hace que tengan un precio asequible.
  • Son fáciles de cocinar: Solo hay que poner los mejillones en una cazuela  y en pocos minutos… Voilá, ¡Un plato delicioso! 
  • Su delicioso y potente sabor a mar, enriquece platos de arroces y fideuas o  pescado.

Consejos para limpiarlos

La manera más común de limpiar mejillones es quitarles las barbas o biso, ( recuerda siempre cortarlas en vez de arrancarlas, porque puedes dañar la carne). Rascamos la concha con un cuchillo para quitar esas pequeñas conchas blancas que suelen traer sus conchas. 

Aunque, para muchos chefs especialistas en cocina gallega o platos con ingredientes producidos por el mar, esas adherencias duras en la cáscara, no es necesario eliminarlas ya que son parte fundamental del hábitat natural del mejillón, y durante la cocción ayudarán a potenciar el exquisito sabor a mar. Por lo tanto, muchos cocineros recomiendan no frotar las cáscaras cuando lavemos los mejillones antes de meterlos en la cazuela, pero si las barbas que si salen de las cáscaras, aunque independientemente de que se puedan quitar o no, según como nos guste o también para muchos, según el tiempo que tengamos para invertir a la hora de cocinar nuestros platos porque a fin de cuentas, a la hora de comernos los mejillones las cáscaras no las necesitamos en nuestro plato. 

Una vez que los hayamos lavado, se deben conservar en un lugar fresco, a poder ser en la nevera, hasta que llegue el momento de cocinarlos. Si no fuéramos a consumirlos el mismo día, uno de los consejos es abrirlos y conservarlos en su propio jugo, llegando incluso a poder congelarlos en su propio jugo. 

Si después de la cocción, han quedado mejillones sin abrir, es mejor descartar estos porque lo más probable es que hayan muerto antes y no se recomienda consumirlos , así como lo que tienen la cáscara rota. 

Aunque, al comprar mejillones de Galicia, y según la Denominación de Origen Protegida Mejillón de Galicia, solo bastaría con lavarlos con abundante agua fría, porque el mejillón gallego, cuenta con las condiciones higiénico-sanitarias exigidas para que cuenten con la calidad excelente con la que cuenta el mejillón de Galicia.

El Mejillón, el producto de mar más versátil en la cocina

El mejillón gallego es sin duda, uno de los productos que nos regala el mar de los más versátiles en la cocina, ya hemos dicho que simplemente limpio lo podemos poner al fuego en una olla tapada y con el vapor de su propio líquido o añadiendo agua, se abrirá y quedará cocido en pocos minutos. Lo mejor es ir retirando los que se vayan abriendo, ya que deben cocerse el mínimo tiempo posible, de lo contrario perderá propiedades y su carne se endurecerá. 

Y como lo prometido es deuda, si hoy no sabes como hacer los mejillones gallegos que tienes en la nevera, te dejamos una de las recetas más tradicionales en la cocina gallega; mejillones a la vinagreta;

Recuerda que para esta receta los mejillones tienen que ser frescos y de buena calidad, de esos gallegos con su intenso color naranja, gracias a las bateas en las Rías. 

Ingredientes de los mejillones a la vinagreta:

1 kilo de mejillones gallegos

1 Vaso de vino blanco

Laurel

1 Cebolleta

½ Pimiento rojo

½ Pimiento verde

1 Tomate

1 Vaso de aceite

½ Vaso de vinagre

Sal

Elaboración de los mejillones a la vinagreta:

Limpiamos bien los mejillones para quitarles las barbas laterales, una vez limpios, los colocamos en una cazuela con un poquito de vino blanco, y una hoja de laurel. Tapamos la olla, y los ponemos a cocer, cuando ya estén abiertos los retiramos y reservamos el líquido.

Picamos las verduras en trozos pequeños, colocamos todas en un cuenco, y las aliñamos con la vinagreta, después de añadirle medio vaso del líquido que antes guardamos de la cocción de los mejillones. Probamos la sal y la ponemos al gusto y mezclamos las verduras con los mejillones, dejándolos unos minutos antes de su consumo en la nevera.   

Para que quede una presentación más bonita podemos rellenar una de las conchas con la mezcla de las verduras con un mejillón. 

Sin duda, un aperitivo muy nuestro, muy de nuestras Rías. 

Échale un vistazo a nuestro post sobre Mejillones en escabeche: Una receta Exquisita